Todo el mundo habla de la entrevista de Tucker Carlson con el presidente ruso Vladimir Putin.
La conversación, de dos horas de duración, fue retransmitida en directo por Twitter. Todos los principales medios de comunicación han cubierto la entrevista.
Puedes verla entera aquí:
https://x.com/TuckerCarlson/status/1755734526678925682?s=20
Después de ocho años siguiendo de cerca el golpe de estado y la guerra civil en Ucrania, y más concretamente la propaganda occidental sobre Rusia, podía decir prácticamente todo lo que Putin iba a decir antes de que lo dijera.
Cualquiera que haya investigado sobre Rusia o Ucrania podría decirlo.
Siempre iba a detallar, en términos convincentes e históricamente literarios, la posición de Rusia sobre Ucrania.
Siempre iba a citar las (muy reales) promesas incumplidas de los diplomáticos occidentales sobre la expansión de la OTAN hacia el Este.
Sin duda iba a volver a insistir en su valioso argumento de que la política exterior de Estados Unidos no parece cambiar nunca, independientemente de quién sea el presidente.
Es un orador inteligente y persuasivo, y siempre iba a hacerlo bien.
Y, si estuviéramos en 2014, sería estupendo.
Pero no estamos en 2014, ¿cierto?
Estamos en 2024 y el mundo se precipita rápidamente hacia la Nueva Normalidad ("multipolar"). Rusia está alineada con la Agenda 2030 y voces muy poderosas de la clase dirigente occidental promueven ahora a Putin y sus puntos de vista, antes marginados.
Ante estas realidades, deberíamos preguntarnos sobre la relevancia y el propósito de este tipo de teatralidad geopolítica.
Recordemos una vez más que todo el mundo está hablando de la entrevista a Putin.
TODO EL MUNDO.
De Hillary a Elon, pasando por Russell Brand.
Los principales medios de comunicación también lo cubrieron. Tal vez lo "comprobaron", tal vez despotricaron o insistieron en que se prohibiera, pero todos hablaron de ello.
Comparemos y contrastemos esa cobertura con la que tuvo la entrevista en 4 partes de Oliver Stone con Putin en 2017.
En serio. Mira la diferencia. Te dice mucho sobre cómo está cambiando la agenda del sistema. No hubo grandes titulares entonces.
Pero no quiero hablar de Putin. Porque todo el mundo está hablando de Putin.
Quiero hablar de Carlson.
El Tucker Carlson que de repente ha sido colocado como un supuesto anti-sistema que duda acerca de JFK y que amenaza al poder con la verdad sobre el 11-S.
El mismo Tucker Carlson cuyo padre fue director de la Voz de América. El mismo Tucker Carlson que censuró e insultó a los escépticos sobre el 11-S en su programa.
El mismo Tucker Carlson que que postuló a la CIA (pero supuestamente fue rechazado).
¿Cómo se produjo esta reinvención?
¿Cuándo ocurrió?
¿Por qué?
Y no, no estoy afirmando que todo lo que dice sea incorrecto porque de hecho mucho de lo que dice es muy correcto. Sus monólogos sobre el estado de la economía, las elecciones de 2020, JFK y el 11-S han sido todos al menos parcialmente acertados.
...pero eso debería hacer que nos planteáramos más preguntas, ¿no?
¿Tuvo un gran despertar?
Incluso si crees que lo tuvo, ¿crees que sus jefes en Fox también? ¿O que Elon Musk lo tuvo? ¿O que cualquiera de estas entidades no podría impedirle lanzar supuestos bombazos de verdad con su dinero si no quisieran?
Tucker Carlson era el programa de actualidad más visto de la televisión norteamericana antes de que, al parecer, Fox News lo despidiera el año pasado.
Desde entonces, y con todos los honores de ser exiliado por el sistema, ha estado transmitiendo en vivo sus programas en X/Twitter, y cada uno de ellos tiene más visualizaciones que CNN o MSNBC o su antiguo programa en Fox... Combinados.
Interesante, ¿no?
El hecho es que los medios tradicionales están muriendo. Lo cual es bueno. ¿Pero crees que la clase dirigente no lo sabe? ¿Crees que no se les ha ocurrido adelantarse tomando el control de las nuevas plataformas mediáticas y plantando "líderes" en movimientos mediáticos supuestamente independientes?
Como hemos tenido que recordar a nuestros lectores últimamente, las personas e instituciones que dirigen el mundo no están vinculadas a ninguna plataforma, método, nación o bandera.
O medios de comunicación.
Compraron todos los periódicos porque eran útiles, "sindicalizaron" todas las cadenas de televisión porque era lo que la gente veía...
Así que ahora que los medios tradicionales mueren, ¿qué crees que van a hacer?
Como un cangrejo ermitaño que cambia de caparazón, simplemente se deslizarán de su antiguo hogar a uno nuevo y reluciente.
Adiós a la CNN corporativa a la antigua, bienvenidas las noticias de guerrilla totalmente orgánicas que se retransmiten en directo en X y que son promocionadas accidentalmente por el algoritmo.
Adiós a los largos editoriales de los periódicos, bienvenidos los tiktoks de diez segundos de falsos influencers en una fábrica de opinión dirigida por el gobierno.
Adiós a Tucker Carlson, promotor de desinformación a sueldo, bienvenido Tucker Carlson, voz de los nuevos medios que de alguna manera sigue siendo promocionado por las mismas fuerzas a las que se supone que se opone.
Ya hemos visto otros ejemplos de este tipo de cosas, por ejemplo los vídeos obviamente falsos de Alexandria Ocasio-Cortez de "mírame transmitiendo en directo mis pensamientos aleatorios improvisados". Como si ella no hubiera tenido un grupo de expertos para decidir exactamente qué tan poco maquillaje debe usar o qué tan "despeinado" debe estar su cabello, o firmado un contrato de patrocinio para el pollo frito que está comiendo.
El punto fuerte de los nuevos medios era que todo el mundo tenía acceso a ellos de forma instantánea, lo que conllevaba una autenticidad marcada por la crudeza. El poder establecido se apoderó rápidamente de estos marcadores de autenticidad y trató de hacerlos suyos. Ahora esa crudeza se fabrica y la autenticidad se falsifica en una cadena de producción.
Y al sembrar los nuevos medios de comunicación emergentes con voces del sistema supuestamente "rebeldes", la clase dirigente se hace con su control.
Además, la transición de los viejos a los nuevos medios también puede utilizarse para cooptar medios independientes y construir falsas narrativas binarias que controlen la agenda. Los viejos medios venden un "bando" y los nuevos, el otro.
Así es como se llega a escenarios disparatados en los que multimillonarios como Elon Musk son considerados una especie de intruso, sin importar cuántos argumentos del Great Reset promueva, o podcasters como Joe Rogan reciben aparentemente 250 millones de dólares del sistema para atacar al sistema, o la "web oscura intelectual" vende vacunas e Israel a partes iguales.
Las viejas voces del poder (Guardian, CNN, New York Times o lo que sea) atacan bulliciosamente a estas nuevas voces "antisistema" (que siempre están vendiendo la misma agenda de una forma ligeramente alterada), sabiendo que la mentalidad de "el enemigo de mi enemigo es mi amigo" les dará crédito en los círculos de los medios alternativos genuinos.
Quiero decir que está muy bien tener a un gran "ex" miembro de la corriente dominante de tu lado y que acepte participar en tu podcast, ¿verdad? Felicitaciones instantáneas, emoción. "Ves, incluso el gran nombre X admite que tenemos razón en esto". Es demasiado fácil dejarse seducir por las narrativas de "celebridades rebeldes". Todos queremos creerlas, ¿verdad?
Y así, colocando a "antiguos" miembros del sistema en puestos de liderazgo de "la alternativa", la propia 'élite' controla la dirección de su supuesta oposición.
Tucker Carlson es la primera voz realmente importante que ha dado el paso, pero no será la última. Y su entrevista con Putin es una muestra más del mensaje de la "alternativa autorizada".
Según Twitter, la entrevista fue vista 140 millones de veces en 24 horas. Tucker y Putin han sido 'tendencia' desde entonces, promovidos por el todopoderoso algoritmo de un sitio propiedad del hombre más rico del mundo, a la vez que aparecían en las portadas de todos los periódicos.
Vaya, genial, ¿no? Los nuevos medios tienen tanta razón que la clase dominante no tiene más remedio que promoverlos.
Es demasiado fácil no darse cuenta de que no hay nada realmente "nuevo" en estos medios. Se trata sólo de un viejo cangrejo ermitaño en un nuevo caparazón.
Fuente:
https://off-guardian.org/2024/02/10/what-no-one-is-saying-about-tucker-carlsons-putin-interview/
Traducido por Counterpropaganda
Sí, que Tucker es un transplante es una idea que se ha estado formando en mi mente y que este artículo confirma y articula.