El templo es sagrado
Como astutos chatarreros, hábiles comerciantes de artículos usados y polvorientos, los propagandistas del régimen, vendedores de cachivaches de toda la vida, intentan, con todas las artimañas a su alcance, inculcar a nuestra juventud todo tipo de bestialidades, todo tipo de amenidades, ocultando, bajo la falsa bandera del "progreso" y los "derechos", meros plagios y diseños de reprogramación de comportamientos, esencialmente funcionales a la consecución de los puntos centrales de una "agenda" acordada de antemano.
Así, estos astutos engatusadores pregonan que la revolución verde es la única salvación del planeta Tierra, sin hacer mención alguna a la revolución productiva en curso y a los intereses económicos en juego, que el antifascismo es una batalla contra molinos de viento que hay que librar a toda costa, que la ideología de género es una conquista de la civilización, las sanciones y el envío de armas como defensa desesperada de la "democracia" y la paz, la precariedad como flexibilidad, la alfabetización frenética como requisito indispensable para entrar en el mercado laboral, la "ciencia" como único credo, la familia como estorbo, el empobrecimiento cultural como entretenimiento, y la basura de la televisión y de las redes sociales como único entretenimiento válido.
La atención a las nuevas generaciones, por tanto, debe llevarse al máximo nivel. Son el objetivo primordial, la arcilla que hay que moldear, el arquetipo del hombre del futuro que hay que construir. En el miserable mercantilismo que caracteriza nuestro tiempo, por tanto, debemos recordar a nuestros jóvenes que hay valores que no deben ser objeto de negociación alguna, y que hay columnas de Hércules que nunca pueden cruzarse, so pena de caer en el olvido. Renunciar a este punto de vista sería miope y extremadamente perjudicial, para el presente y el futuro de nuestros jóvenes, ahora en el centro de lamentables, burdos y continuos intentos de violación intelectual.
"El templo es sagrado porque no está en venta", nos enseñó Ezra Pound en su momento. Hoy debemos reiterarlo en voz alta.
Fuente: https://www.weltanschauung.info/2023/03/il-tempio-e-sacro.html?m=1
Traducido por Counterpropaganda